El paisajismo sostenible es una de las formas en las que podemos honrar a nuestro país al cuidar su biodiversidad y contribuir al bienestar ambiental.
Un paisaje sostenible es aquel que se ajusta al entorno que lo rodea y requiere insumos que están disponibles de forma natural. Es decir, el paisaje existe en armonía con su ecosistema local.
Uso de plantas autóctonas mexicanas
La particularidad de utilizar especies nativas en nuestros paisajes es que estas conservan rasgos de adaptación natural, puesto que ya están adaptadas al clima de la región a la que pertenecen, no como en el caso de aquellas especies exóticas que pueden requerir de un mayor mantenimiento y de una gran cantidad de agua.
Algunas ventajas del uso de plantas nativas son:
- Uso eficiente del agua
- Mejor adaptación al suelo ya que no requieren de excesivas cantidades de fertilizantes, sustratos adicionales o mejoramiento del suelo.
- Se crean interacciones ecológicas: las pequeñas aves y mamíferos, insectos polinizadores, escarabajos, etc. propias del lugar, son atraídos a ellas, que forman comunidades donde se desarrollan interacciones ecológicas necesarias e importantes para los ecosistemas.
- Mayor resistencia a las condiciones climáticas propias del lugar.
Al elegir especies autóctonas, estamos contribuyendo a la conservación de la biodiversidad, reduciendo el impacto ambiental y creando jardines que son un reflejo auténtico de la naturaleza local.
No podemos olvidar el sistema de riego. Optar por sistemas de riego por goteo o la recolección de agua de lluvia son métodos efectivos para reducir el consumo de agua.
Al adoptar prácticas sostenibles y favorecer la vida silvestre contribuimos a la mitigación de los efectos del cambio climático y al bienestar de nuestra comunidad.
